Los sistemas de extinción contra incendio están conformados por tuberías, válvulas, rociadores, gabinetes, etc; pero las bombas constituyen la fuente vital de estos sistemas.
En todo sistema de extinción contra incendio se cuenta con una bomba principal y una bomba jockey; siendo la bomba principal el corazón del sistema ya que es la que aporta el caudal y presión de agua necesaria a los rociadores y mangueras, para extinguir o controlar un incendio.
La bomba jockey o de respaldo, tiene la función de mantener todo el sistema de extinción presurizado con agua e ir reponiéndola a medida que se vaya perdiendo debido a pequeñas fugas de agua por válvulas o accesorios; evitando así el arranque innecesario de la Bomba Principal.
Ambas bombas tienen sus paneles controladores, que se encargan de regular su apagado y encendido automáticamente, de acuerdo a las presiones de trabajo del sistema de extinción y a las presiones de arranque y parada que se les asigne.
La bomba jockey se acciona con un motor eléctrico, mientras que la bomba principal puede ser accionada con un motor eléctrico o un motor diésel.
El sistema de bombeo conformado por la bomba principal, la bomba jockey y sus controladores, debe colocarse en modo de funcionamiento automático para que la bomba jockey mantenga la presión en toda la red de tuberías del sistema extinción; de esta manera garantizar que la bomba principal arranque cuando la presión llegue a la prefijada en su controlador, debido a la caída de presión de agua por la activación de rociadores ante un incendio o apertura de mangueras para combatirlo.
Con ambas Bombas en buenas condiciones se garantiza la operatividad del sistema, por ende, la importancia de que las mismas, y con mayor énfasis la bomba principal, deba ser probada frecuentemente para observar su correcto funcionamiento y certificar que mantiene sus parámetros de operatividad establecidos.
Fuente: Vicente Andrade